Invertir en propiedades con rentabilidad incluida significa que el objetivo es obtener beneficios económicos de la propiedad a través de su arrendamiento. Las inversiones inmobiliarias pueden ser una buena opción para hacer crecer el patrimonio a largo plazo, pero no están libres de riesgo. Para evaluar la rentabilidad de una inversión inmobiliaria, se puede considerar:
Calcular el rendimiento de la inversión (ROI)
Analizar el flujo de efectivo
Considerar la apreciación del valor
Evaluar la ubicación
Investigar el mercado local
Calcular el costo de oportunidad
Realizar un análisis de riesgos
Consultar a profesionales
Calcular la rentabilidad bruta dividiendo los ingresos anuales por el precio de compra o valor actual de la propiedad, y luego multiplicando el resultado por 100
